Vivo de milagro #AnécdotasDeUnBomberoCBM

Llamadas de auxilio, sirenas de ambulancias, motobombas y bomberos apresurados… era el panorama del 27 de marzo de 1995 alrededor del medio día. Un incendio de grandes proporciones amenazaba con expandirse en el interior de una bodega del Cuerpo de Ingenieros del Ejécito de Guatemala, a cercanías del aeropuerto internacional La Aurora.

“Fue un domingo” recuerda el Oficial Mayor Ricardo Lemus, quien era el jefe del departamento de Relaciones Públicas del CBM de ese tiempo.

“Salimos… porque además del trabajo de los bomberos, tenía que documentar lo sucedido” puntualiza.

“En ese tiempo usábamos una cámara VHS -un cajón grande-, yo ingresé a donde estaban trabajando mis compañeros, se veían las llamas, se sentía la radiación  y el humo empezaba a hacer sus efectos, se reflejaba en el estado físico de mis compañeros.” recuerda.

“Todo era confuso, no sabíamos qué había provocado el incendio, ya que el fuego se propagaba rápidamente, tampoco sabíamos qué contenían las bodegas del lugar, después nos enteramos que habían explosivos en la bodega.” menciona.

“Yo estaba documentando lo que sucedía, con la cámara de vídeo, de repente se apagó, entonces tuve que salir del lugar de las llamas, fui a revisar la cámara atrás de la B26 (una motobomba), me retiré como 100 metros, cuando de repente solo escuché una fuerte explosión, quedé inconsciente o me fui de este mundo por unos segundos (se ríe), todo se oscureció alrededor de 30 segundos, cuando reaccioné… vi la cámara tirada, la batería en un lugar y los demás accesorios en otro” recuerda confusamente.

“Armé la cámara, escuchaba gritos, mi preocupación eran mis compañeros… no sabía si soltar la cámara e ir a ayudarlos. Era joven, tenía 24 años y no supe qué hacer» Se lamenta.

“La cámara nunca me había fallado, no entiendo porqué se apagó ‘de la nada’, tal vez no me tocaba morir. Estoy vivo de milagro” suspira.

“En ese incendio, ocho compañeros de Bomberos Municipales resultaron heridos y con quemaduras; un compañero bombero Voluntario, falleció y otros quedaron heridos” enfatiza.

Ricardo Benito de Jesús Lemus de la Cruz es un Oficial Mayor de 3ª clase, tiene 46 años de edad y 28 años de servicio dentro de Bomberos Municipales, ha sido Jefe y Ejecutivo de servicio, Jefe de la Patrulla Especial de Rescate, Instructor en la Escuela Técnica CBM, Piloto de todas las unidades y Jefe del departamento de Relaciones Públicas por 15 años.

Además de ser bombero, es Periodista Profesional y ostenta una Licenciatura en Ciencias de la Comunicación.

Según indica el Oficial Mayor Ricardo Lemus, se graduó como Bombero el 3 de junio de 1989, inmediatamente comenzó a trabajar para el CBM, estuvo en la tropa por 5 años y fue en 1994 cuando por orden superior fue transferido al departamento de relaciones públicas.

“Yo no sabía nada de comunicación, de fotografía, solo tenía sexto primaria.” afirma con emoción.

En ese tiempo era asistente del OM Julio Rodríguez (actual Jefe General B), y según confirma, eso no le preocupaba, porque no tenía presión mayor que tomar vídeo.

Al tener cuatro meses en dicho puesto, hubo reestructuración interna y fue cuando lo dejaron como jefe del departamento, y él «sin saber nada”, refiere.

Durante una documentación de un accidente aéreo en El Salvador, llegó junto a la Patrulla Especial de Rescate. Supuestamente había tomado muchas fotografías. Cuando llegó a la oficina y revisó, no tenía ni una sola.

Se decepcionó tanto, que presentó su carta de renuncia y el comandante no se la aceptó. Fue entonces que en 1995 comenzó a estudiar los básicos y el bachillerato por madurez, además de capacitarse en comunicación y relaciones humanas. “Eso me ayudó porque ya no temblaba tanto para dar declaraciones a los medios de comunicación” enfatiza.

Luego de graduarse del nivel medio, dejó de estudiar por dos años, pero en el año 2000 ingresó a la Universidad de San Carlos de Guatemala en el área de Periodismo Profesional y seguidamente la Licenciatura en Ciencias de la Comunicación. «En el 2012 me gradué, ya no era solo bombero, sino que ahora también era profesional.” acentúa.

“… la mejor condecoración es hacer bien el trabajo, no considero importante que haya que haber un acto por una buena labor, sino la satisfacción de hacer las cosas bien.”

Sin embargo, ha recibido las condecoraciones: Julio Obiols, por 25 años de servicio en el CBM; Más allá del Deber.

“Yo invito a los muchachos a que no se queden estancados, bomberos es una gran puerta, una gran oportunidad para quien quiera lograr muchas cosas, pero también para buscar la superación personal y profesional, el único requisito es amar lo que hacen, amar a la institución.” invita el OM Ricardo Lemus.